Como mayo es el mes de las madres no he querido dejar que termine sin dedicarles un post. Esta entrada va para todas las madres y en especial para la mia.
Dice un poema de Pablo Neruda que “queda prohibido no sonreír a los problemas, no luchar por lo que quieres, abandonarlo todo por miedo, no hacer realidad tus sueños” La primera vez que lo leí no pude evitar acordarme de mi madre, esto es lo que siempre me ha enseñado y gracias a ella hoy existe -Adopta un Naranjo-
La historia de nuestra finca está hecha por mujeres. La vida ha querido que sean ellas las que lleven las riendas del cortijo, y como ya sabéis que las casualidades siempre vienes juntas, además todas eran las pequeñas de sus familias. Si, esta es una finca de mujeres, eso se nota y además imprime carácter. Ha sido mi madre la que me ha enseñado a querer y valorar esta tierra. También es la que cada primavera me lleva a soplar los dientes de león para pedir un deseo, mientras sus pequeños alfileres blancos vuelan persiguiéndolo. El deseo se ha cumplido y -Adopta un Naranjo- es una realidad. Yo por si acaso sigo soplando dientes de león cada primavera…